El pasado jueves correos informó que ademas de los coches eléctricos, parte de su flota de reparto postal ecológica también estará formada por bicicletas eléctricas. Conocemos que se ha realizado una inversión inicial de 139.000 euros pero no sabemos el número de bicicletas adquiridas.

Se cambiará el antiguo carrito de la compra amarillo donde llevan actualmente el correo postal en zonas peatonales y cascos antiguos por bicicletas eléctricas. Esta claro que debe de ser más eficiente, mi duda es si es ahora cuando se han dado cuenta en correos que existen otras formas de reparto más efectivas, porque si es así, se nos demuestra una vez más que las empresas conforme más grandes son más torpes y lentas a la hora de cambiar.

Aunque me parece una iniciativa muy llamativa y positiva, defiendo y defenderé que un Segway es lo óptimo para el reparto postal en cascos antiguos y zonas peatonales. Sólo el tiempo que se ahorra una persona en aparcar y montarse en un segway en comparación a una bicicleta, ya compensa. Sin tener en cuenta el esfuerzo, la velocidad, la imagen innovadora, el tamaño, la portabilidad, y un largo etcétera.

También hemos de destacar que si lo que buscan es emitir menos CO2 ya podían sustituir las motos de reparto Vespa con más de 20 años que hacen un ruido impresionante antes que los carritos de la compra.

De cualquier forma lo que pone de relieve este tipo de medidas es que se está empezando a cambiar la forma de moverse día a día. Y esto es muy positivo para todos, parece que se esta levantando el pie del acelerador. El problema es que hay que pisar el freno un poco más fuerte.